La cruel derrota 2 por 1 ante Chicó regresó los fantasmas a las toldas de Millonarios. El cuadro Embajador solo necesitaba un punto para instalarse en la gran final pero los boyacenses le dañaron la fiesta.
Una dura bofetada para los Azules en Tunja, ahora los dirigidos por Gamero deberán buscar el resultado en casa ante Medellín.